La palabra arquitecto procede del latín architectus y este a su vez del griego arkitekton. En griego el término estaba formado por otros dos: arki, que significa ‘el primero, el principal’ y tekton, ‘artesano, carpintero, constructor’, lo cual vendría a poder traducirse como ‘el obrero más importante’.

Sin embargo, la etimología popular ha hecho derivar esta palabra de algo que, bien mirado, tendría su lógica, aunque no se acepte como científico. Algunas personas piensan que arquitecto significa y procede de arco y techo, por ser de enorme frecuencia e importancia en la tarea de estos profesionales levantar y mantener esos dos elementos constructivos.

¿Qué etimología les gusta más? Las dos son muy buenas, ¿verdad?