Inmatriculación: Acto por el que por primera vez se inscribe un bien en el Registro de la Propiedad.

Es palabra que no está en el Diccionario de la RAE, aunque gracias a ese acto la Mezquita de Córdoba, entre otras 4 500 propiedades, ha pasado a ser propiedad de la Iglesia española. A partir del acuerdo firmado entre el Estado español y la Santa Sede, este tipo de bienes no pagan impuestos y los rendimientos que se obtienen de su uso, por ejemplo, las visitas turísticas, son literalmente, dinero negro (dinero que no ha sido declarado a Hacienda) aunque no ilegal.

Es algo que la Iglesia hace porque puede, es decir, porque la ley se lo permite, pero a mí me suena a  Inmaculada Corrupción.