Si ustedes ven las series de televisión o las películas en versión original, a menudo escucharán la palabra bitch. Este término se utiliza en inglés para referirse a la hembra de cualquiera de las especies caninas, excepto los zorros, que es casualmente lo que en un principio yo creía que significaba, «zorra». Eso en cuanto al significado literal se refiere porque en la práctica su traducción al español ha dado en generalizarse como «perra» y «zorra», siempre en femenino que ya saben ustedes que hay palabras que en masculino significan una cosa, más positiva, y en femenino otra, claramente negativa.

Con el tiempo este término ha ido evolucionando y según el contexto se podría traducir también por «arpía», «bruja», «puta» o «guarra», todos femeninos, todos loables como pueden ver. Siguiendo con la evolución de esta palabra, últimamente bitch califica también a los hombres, pero designa más bien un hombre pasivo o servil (¿alguna referencia al estereotipo femenino?, claro que no, pura casualidad). En las cárceles, por ejemplo, los hombres que obedecen al matón-líder son calificados como bitches.

Otro uso de la palabra es en la expresión son of a bitch, literalmente ‘hijo de perra’, en la práctica, ‘hijo de puta’. Los norteamericanos, tan aficionados a los acrónimos, lo escriben también s.o.b., con los puntos, para que no se confunda con sob, ‘sollozo’ que es una sosada de palabra sin ninguna referencia al género femenino.