En el marco de la capitalidad europea de la cultura de San Sebastián (2016) se promovió y editó un libro, en castellano y euskera, que recogía la correspondencia mantenida por Héctor Abad y Fernando Aramburu.

Héctor Abad es un escritor colombiano cuyo padre fue asesinado por las FARC. Correspondencias / Korrespondentziak es un libro muy interesante en el que ambos escritores dialogan sobre la violencia y la escritura y la forma en que los dos enfrentan ambas cosas. Traigo aquí una cita de una de las cartas de Héctor Abad en la que se aprecia cómo, cuando nuestro país nos hiere tanto, queremos olvidar hasta el idioma en el que aprendimos a hablar. La mayoría de las veces es tan desgarradora esa amputación que no podemos soportarla y volvemos a nuestro lenguaje y, como dice Héctor Abad, intentamos que nuestro país «sea menos mierda».

«Cuando yo me exilié en Italia quise volverme italiano. Detestaba a Colombia y quería olvidar a mi «país de mierda» (así lo llamaba). Hablaba italiano casi sin acento y lo escribía correctamente. El problema llegó cuando quise escribir una novela en italiano. Quería ser italiano, pero también escritor. Había algo que me faltaba, lo más hondo, lo más íntimo: la lengua de la infancia, de la adolescencia. Mi italiano era correcto, pero sin gracia, sin resonancias remotas, hondas. Y ocurrió algo peor: empecé a olvidar el español. Se me salían italianismos uno tras otro por la cercanía de nuestras lenguas. Creo que por eso volví a mi «país de mierda» y que por eso estoy aquí, siempre intentando que sea menos mierda.»

Héctor Abad & Fernando Aramburu: Correspondencias / Korrespondentziak