Amalgama es una palabra llena de aes, abierta y fácil de pronunciar, de la que podríamos decir que es como un pasillo largo que se recorre sin sobresaltos. Podemos hablar de una amalgama de colores o de una amalgama de sensaciones, en música existe el término al compás de amalgama y hasta existe en Palencia un grupo de música folk que se llama Amalgama.

Según el Diccionario de la RAE, amalgama significa:

Según el Diccionario Etimológico de Joan Corominas «amalgama es una ‘aleación de metales, especialmente las formadas por el mercurio con otros metales’. Tomada del latín amalgama, alteración del sinónimo algama que, junto con las variantes algamala, algamana y almagala, procede del árabe yamâca ‘reunión’; el castellano lo tomaría del francés, donde alga ya se halla a principios del siglo XVII, amalgame en el XV y las otras tres formas en la primera mitad del XVI.»

O sea que amalgama significó ‘reunión’ en árabe, luego pasó al latín cambiando de forma y de significado y el castellano la tomó prestada del francés. Hay que ver las vueltas que dan las palabras.